La mujer se siente menos femenina si tiene un busto poco desarrollado; la flacidez y caída mamaria, bien sea por razones constitucionales, después de la lactancia o menopausia producen igualmente una afectación psicológica en la vida de relación a lo que se suman las pacientes con hipertrofia mamaria las molestias locales, de hombros y espalda cansada por el volumen y peso, independientes de las dificultades en el vestir.

La cirugía mamaria consigue mejorar la autoimagen corporal y autoestima y facilita la relación en el ambiente afectivo y social. Lo que logramos es mejorar la apariencia y forma de los senos. También puede incluir la corrección de asimetrías o anomalías en la forma de los senos. Hay varios tipos de cirugías de mama estética, los más comunes son:

1. Aumento de senos: también conocido como mamoplastia de aumento, este procedimiento se realiza para aumentar el tamaño y la plenitud de los senos. Se colocan implantes de gel de silicona o solución salina detrás del tejido mamario o debajo del músculo del pecho para lograr el resultado deseado.

2. Reducción de senos: conocida como mamoplastia de reducción, esta cirugía se realiza para reducir el tamaño y el peso de los senos. Se elimina el exceso de tejido mamario y piel para lograr un tamaño más proporcionado y aliviar los problemas asociados con senos grandes, como dolor de espalda y cuello.

3. Levantamiento de senos: también llamado mastopexia, este procedimiento se realiza para levantar y reafirmar los senos caídos. Se elimina el exceso de piel, se reposiciona el tejido mamario y se elevan los pezones para obtener una apariencia más juvenil y firme.

Es importante tener en cuenta que la cirugía de mama estética es un procedimiento personalizado y que debe ser realizado por un cirujano plástico cualificado y experimentado. Antes de someterse a cualquier tipo de cirugía, es esencial tener una consulta con un profesional para discutir tus objetivos, expectativas, riesgos y opciones de tratamiento.